Me niego

Me niego a creer que somos la generación perdida, me niego a pensar que somos la generación que no quiere relaciones, que no quiere comprometerse con nada ni con nadie. Me niego.
Yo creo en la generación encontrada, aquella que nada se la ha dado por hecho sino que ha tenido y tiene que luchar para lograr aquello que anhela, aquella que cuando empieza algo se compromete con ello y no parará hasta que acabe.
Creo en la generación que no se rinde, que por muchas piedras que nos pongan en el camino día tras día, aún seguimos en pie y si en algún momento consiguen hacernos caer, nos volveremos a levantar más fuertes que nunca.
Somos una generación de valientes, de valientes porque somos la generación que nos ha tocado salir ahí fuera a buscarnos la vida, a vivir nuestra vida, con una mano delante y otra detrás, a veces en nuestro propio país lejos de los nuestros, y otras en otros países lejos de nuestra gente.
Soy de la generación de la tecnología, de los mensajes de whatsapp y los "me gusta" de facebook, pero os diré algo, yo también se disfrutar de los buenos momentos con amigos en un bar o sentados en medio de un parque arreglando el mundo, y sí me gusta hacer fotos, me gusta tener una instantánea que me recuerde cuando sea mayor, la gran carcajada, o aquel abrazo infinito, en definitiva, que guarde miles de momentos en ella. Pero al igual que me gusta esto, también me gustan los mensajes de whatsapp de la gente que tienes lejos, de las maravillosas personas que me han regalado las redes sociales y no habría podido conocer nunca sino fuese de esta forma, los mensajes que hacen que un día gris recobre un poco de color.
Yo no pertenezco a la generación perdida, ni de broma, yo pertenezco a la generación encontrada, la que lucha y alcanza, la que ríe y alarga la vida, la que vive y disfruta del ahora, la que ama y se compromete, la de los mensajes de whatsapp pero de las grandes charlas también, la generación que se niega a dejarse hundir y acabar a la deriva.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Cambiando

Se dejaba llevar...